martes, 1 de septiembre de 2015

¡¡Llegó la Hora, El Pueblo ha Despertado!!

Mensaje de un apóstol vivo de la resistencia de la Comunidad Copal AA La Esperanza Coban Alta Verapaz. Sobreviviente del genocidio en Guatemala y ante la crisis política que atraviesa el país y la ola de corrupción desatada actualmente, expresa su sentir.

Mi Memoria y libre expresión de pensamiento.
Ya llegó el tiempo de los pueblos, del pueblo indígena y campesina, el toque de la trompeta por todo nuestro país. 

¡Guatemala, Guatemala!
Levántate mira a tus hijos tirados por todos lados, en las calles y en las comunidades, sin que nadie por ellos.
Las grandes masacres de tierra arrasada cometidos en tiempos de la Guerra de los años  82 al 98; y aún seguimos siendo víctimas de la violencia de hoy. 
Los asesinatos a diario de  líderes  y en general de la población indígena.
Por eso ¡Guatemala, Guatemala, Despiértate ya! Llegó tu día.
Los grandes crímenes que cometiste contra tus propios hijos, no debe volver a pasar.
La sangre derramada clama al Creador, y los huesos gritan por todos lados dispersos en las montañas.
Hoy en día nos están acabando de matar, robándose nuestros impuestos, dejando a  hospitales, escuelas, sin abastecimiento.  Madres, niños se mueran en los hospitales por no recibir atención y medicamentos; niños de las escuelas sin refacción escolar, niños de los lugares más pobres muriéndose de hambre, etcétera, etcétera…
Los campesinos pobres ya no aguantamos más de esto, escuchar tantos discursos y promesas de los políticos que solo nos engañan.
Es muy grande el daño que nos hizo la guerra, miles de hermanos fueron muertos por estos tres Generales: Lucas García, Rios Montt y Mejía víctores. ¿Cuándo serán encarcelados estos asesinos? Ya se van a morir de viejo y no podemos encarcelar sus almas y su espíritu. Es mejor hacer justicia antes que se mueran. Pero no se hemos visto resultados.
Estos huesos que vemos aquí, es de las más de 350 personas que fueron  masacrados en Xalbal y en Cuarto Pueblo, Ixcán Quiché. Así mismo 65 personas masacradas en Piedras Negras Barrillas Huehuetenango, entre hombres, mujeres, ancianos y niños.  A los hombres les tumbaron las cabezas con machete, luego los amontonaron juntos y les prendieron fuego. A las mujeres y niños, les encerraron en la casa de reunión y le prendieron fuego. El 17 de mayo de 1982, al amanecer los huesos y las cabezas de nuestros hermanos estaban amontonados como ayotes quemados entre las cenizas.  







De estos masacres solo pudieron escapar 6 niños/as, quienes tuvieron que caminar una semana en la montaña para encontrarse con un grupo de personas que también iban huyendo. ¿Acaso es alegría escuchar esto?  ¿Quiénes fueron los responsables? ¿Quiénes fueron los soldados? ¿Fueron hijos de los Generales, de los ricos o hijos de los campesinos?

Los sobrevivientes, discapacitados, viudas/os, huérfanos, están pasando ahora por un proceso llamado: Duelo interminable. La separación de la familia; perder a un hermano, una hermana, un hijo, una hija; perder al esposo, a la esposa; perder un miembro del cuerpo; Perder la casa, la tierra, los animales domésticos; perder la cosecha, un trabajo etcétera, etcétera. 





         









 ¿A caso es fácil olvidar esto? Claro que no! No es fácil olvidar esto de nuestra mente y de nuestros corazones.  Somos sobrevivientes de la guerra.

Yek Tmink Pels


No hay comentarios.:

Publicar un comentario